Cameron Boyce, la estrella de Disney Channel de 20 años, falleció por muerte súbita e inesperada del epiléptico (SUDEP, por sus siglas en inglés), según confirmó la oficina forense del condado de Los Ángeles, en Estados Unidos.
El joven falleció mientras dormía tras sufrir una convulsión el 6 de julio en su casa de North Hollywood.
Inicialmente, la familia había explicado que la convulsión había sido producto de una enfermedad por la cual el joven estaba recibiendo tratamiento, pero no había especificado cuál era dicha aflicción.
La epilepsia es un trastorno del sistema nervioso central (neurológico) en el que la actividad cerebral se vuelve anormal, lo que provoca convulsiones o períodos de comportamientos o sensaciones inusuales.
Este trastorno se trata con medicamentos o, en ocasiones, se recurre a la cirugía para controlar las convulsiones.
La oficina forense llevó a cabo una autopsia el 8 de julio, y en ese momento determinó que se necesitaban hacer más pruebas para establecer la causa de su deceso.
Los resultados confirmaron ahora que su muerte se debió a causas naturales.
Su caso volvió a recordar el hecho de que el riesgo de muerte prematura en las personas epilépticas es hasta tres veces mayor que en la población general, según la OMS.
La muerte súbita e inesperada del epiléptico es una complicación rara pero conocida de la epilepsia que provoca la muerte de 1 de cada 1000 adultos con epilepsia al año.
1 de cada 1000
«Si alguien con epilepsia muere de manera repentina e inesperada, y no se encuentra una causa de muerte obvia, a esto se lo llama muerte súbita e inesperada en epilepsia (SUDEP por sus siglas en inglés)», dice en su página web la ONG Epilepsy Action, de Reino Unido.
«Se ha visto que SUDEP está vinculada a las convulsiones, sobre todo a las tonicoclónicas (que comprometen a todo el cuerpo)», añade.
«Se desconoce la causa exacta y es posible que no haya una única explicación. Sin embargo, se estima que la actividad de la convulsión en el cerebro puede a veces provocar cambios en la respiración o en el ritmo cardíaco».
Esto puede hacer que la persona deje de respirar o que su corazón deje de latir.
Recomendaciones
Según Epiplepsy Action, la manera más efectiva de reducir el riesgo de SUDEP en personas con epilepsia es tratar de sufrir la menor cantidad de convulsiones posibles.
Para ello recomiendan tomar la medicación tal y como lo indicó el médico, así como no hacer cambios en la medicación sin consultar previamente con el clínico.
Sugieren también no dormir boca abajo, ya que investigaciones recientes indican que esta posición aumenta el riesgo.
Otra sugerencia consiste en evitar las situaciones que pueden propiciar una convulsión, como la falta de sueño, el estrés o la ingesta excesiva de alcohol.